Sin el bullicio de otras navidades, en el año 2010, la calle más comercial de mi ciudad acogió algunas esculturas de Rodin: Los burgueses de Calais y “El Pensador”. De este último, el hondo calado de cualquiera que fueran sus pensamientos se traducía en la visión de la musculatura a través de su piel.
Al observarlo de frente, me miraba pero no me veía. Tal vez cavilaba sobre la búsqueda de la felicidad mientras observaba el consumismo en época de crisis. Quizás con su desnudez deseaba transmitir que el materialismo no era el camino…
A los pocos días, encontré una escultura rústica, sin el más mínimo atisbo de refinamiento. “El Contemplador”, es de madera de pino trabajada con motosierra. Tampoco percibió mi presencia. Miraba al cielo con la sapiencia del campesino. Sólo le interesaba saber el momento propicio para la siembra recolección de la cosecha o comportamiento de los animales. En las noches estrelladas busca lucecitas nuevas que bautiza con nombres sacados de su escaso vocabulario. Y sus únicas preguntas, de cómo llegan hasta allí y quién las recoge cuando sale el sol, nunca obtiene respuesta.
Situándolos en la balanza de la importancia, me pregunté si las cuestiones que se plantea el hombre culto eran de mayor o igual peso que las del analfabeto en su pequeño entorno…. Pero hoy, al resucitar esta entrada, me doy cuenta de que en esa comparativa olvidé algo tan básico como es la relatividad.
©Pilar Cárdenes 2011
Quizás el mal endémico de nuestro tiempo es que pensamos poco. Algo más de reflexión sensata y serena vendría bien en estos tiempos tan agitados que vivimos.
ResponderEliminarUn saludo.
Creo que la reflexión es un bien atemporal, ahora y siempre necesario.
EliminarUn saludo, Cayetano.
Creo que la balanza de la importancia tienen el mismo peso en los dos casos, ya que para cada cual en su medio, lo que piensa es importante si de ello depende un resultado beneficioso...
ResponderEliminarUn bonito y original relato que hace pensar.
Un abrazo Pilar.
Así lo creía yo también hasta que leí un matiz que introdujo Miguel Pina en el comentario siguiente a este.
EliminarUn abrazo y buena semana, Elda
Hola Pilar, supongo que todo es relativo según desde que perpesctiva se mire. Respecto a que o cual pensamiento puede tener mayor valor, quizás sea el del hombre culto porque aporte, si es que el caso, alguna idea en relación a al conjunto social. Pero si hablamos de importancia moral, sin duda ambas opiniones son igual de válidas desde el punto de vista humanista. Un buen texto para reflexionar. Un gran saludo.
ResponderEliminarHola Miguel, me gusta la aportación que haces respecto a la importancia en relación al conjunto social.
EliminarUn saludo y buena semana.
Muy interesantes tus reflexiones sobre el que piensa y el que contempla.
ResponderEliminarUno mira hacia abajo y, probablemente, hacia adentro; el otro hacia el cielo, hacia la belleza del universo. Los dos hacen sus aportes.
Además del texto, también muy buenas tus fotos.
Besos, Pilar.
Cierto, Mirella. La postura y mirada de introspección de uno respecto al otro. No lo había visto de esa manera. Muchas gracias.
EliminarBesos y buena semana
Hoy no la has olvidado, la relatividad es importante. Depende desde donde se mire, con que ojos, en que situación, y no depende de la cultura especialmente, el culto nos puede transmitir mejor su pensamiento pero nadie asegura que sea el optimo. Reflexionemos sobre ello que nos va a venir muy bien. Saltibrincos
ResponderEliminarTuvieron que pasar años, Ester jajaja!. Saltibrincos para ti también.
EliminarEs un relato que invita a meditar, me gusta...
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, maricarmen!
EliminarRecuerdo ver la figura de El pensador,en la calle Triana, cuya foto has colgado. Recuerdo el impacto de poder ver algo así, tan cercano, tan histórico.
ResponderEliminarMuy interesante tu post!
Un abrazo
Así es, un lujo que no creo se repita. Y aunque el Pensador es su obra más significativa, la historia y la expresión de cada uno de los burgueses de Calais me produjo gratísimas sensaciones...
EliminarUn abrazo, lunareja
recien te conozco me gusta tu blog te leo y los leo a tus comentaristas
ResponderEliminargracias por compartir lo tuyo feliz diciembre
Reholas, Mucha. Tiempo sin verte. Feliz para ti también.
EliminarTus líneas hacen pensar. A veces una persona que nos parece sencilla sólo lo es en apariencia y cuando rascas en sus pensamientos descubres una hondura notable. No hay más que acordarse de Miguel Hernández, a quien el intelectual Pedro Salinas definía como "pastor noblote y generoso", obviando su hondura poética.
ResponderEliminarCon mi deseo de que el próximo 2019 se cumplan todos tus deseos. Un abrazo.
Desconocía la anécdota que cuentas sobre los poetas y te lo agradezco de veras. ¡Me encanta aprender! :)
EliminarAna Mª te deseo un 2019 cargado de salud y alegrías. Un abrazo.