Hasta ese momento evitó cualquier
referencia a su situación. Pero una sensación que no lograba definir empezó a
difuminar el tiempo embalado de cualquier sueño que le removiera las emociones.
Y sin más dilaciones, desprecintó la memoria para buscar la ilusión
extirpada de cuajo cuando se abrió la puerta de la adversidad. Y hoy, antes de que
la vida se le durmiera, despertó en la belleza que le rodeaba. Editó la
realidad para archivar miedos, redactó el presente imprimiéndole personalidad,
e inició el envío de su propio regalo, temeroso de que alguna herramienta de la
siguiente década pueda arrastrarlo a la papelera.
© Pilar Cárdenes
Pues que no lo tire a la papelera, y que se le quede algo: anda que yo por ceporro no tiro cosas, y es tan fugaz; vamos visto y no visto.
ResponderEliminarBesos Pilar
Eso, Rafa, visto y no visto.
EliminarUn abrazo
Me encanta tu originalidad y el cómo vas forjando una historia sobre las emociones sentidas.
ResponderEliminarUn abrazo mi querida Pilar.
Muchas gracias, Aurora. Me alegra que te gustara.
EliminarUn abrazo
Que original y que bello relato. Un ejemplo magnifico para seguir las instrucciones tal como las cuentas, a pesar de ser más difícil con la voluntad que con las palabras.
ResponderEliminarMe encantó Pilar, es precioso lo que has escrito y como te digo al principio muy original.
Un beso y feliz día de Reyes.
Pues sí, Elda, las palabras se las lleva el viento y el papel aguanta lo que le echen.
EliminarMuchas gracias por tu visita y comentario.
Besos
Una buena idea la de editar la realidad para no verla siempre en sus aspectos más negros y lograr quedarse con las miguitas de luz que siempre hay por todos lados.
ResponderEliminarMuy bonito texto para un año que inicia, Pilar.
Un abrazo de los grandes.
Ojalá que se pudiera... Aunque pensándolo bien, todos gozamos del libre albedrío para quedarnos con esas miguitas y disfrutar los mejores aspectos de la vida.
EliminarMuchísimas gracias por todo, especialmente por el maravilloso cuento que acabo de leer en tu espacio.
Un abrazo, Mirella.
Lo probaré.
ResponderEliminarIgual funciona.
Besos.
No te prives!
Eliminar¡Ojo con la placa madre!
Besos
Qué preciosidad de texto! Muy original la forma de plantearlo! Un abrazo enorme!
ResponderEliminarHola, Luna. Muchas gracias. Me alegra que te haya gustado.
EliminarUn abrazo!
Te leo y sonrío
ResponderEliminarun abrazo desde
el mes de enero
Cosita buena pa´la salud! :)
EliminarEntre hospitales y sobresaltos, por fin encaro el 2018 como se debe, leyendo unas líneas sugerentes, las tuyas.
ResponderEliminarMis buenos deseos para este 2018.
Vaya, Ana, desconocía que hubieras estado en tan malas circunstancias.
EliminarEspero y deseo que el 2018 se porte bien y lo finalices con alegría.
Me encantó eso de "desprecintar la memoria”. Los miedos vuelan lejos cuando se vive el presente con plenitud.
ResponderEliminarBesos, Pilar
Hola Myriam, disculpa mi tardanza en responder a tan amable comentario.
EliminarEstoy plenamente de acuerdo con el alejamiento de los miedos.
Besos y buena semana